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AUDIO RELATO VIVARIUM

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  ¡Hola! Gracias por tu lectura del relato VIVARIUM .  Aquí te dejo el enlace del AUDIO RELATO  por si te animas a escucharlo Mil abrazos

VIVARIUM

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     Mientras que aquella otra estuvo viva el cielo no paró de amenazarle tormenta. Antes del primer rayo ya se escuchaba el trino metálico que la despertaba de su ensimismamiento. La mujer a la que ella llamó Comadre estaba a su lado. Y así para siempre con los ojos vacíos e indiferentes.     La  criatura apareció en el silencio cruzándose con María Gori. Fatalidad, ventura o azar. Las dos vivían en la misma calle, en la misma dirección. La una en el hueco adaptado del primer piso aledaño al semisótano y la otra, en el tercero; un espacio luminoso abierto a la urbe. Aquel agujero de la una era lo más parecido a una madriguera de garduña con los huesos y despojos de sus víctimas descomponiéndose al amparo de una mirada astuta. La otra, en una cuadrícula de color manzana ordenada con recuerdos y fetiches; devanándose los sesos por alcanzar una plenitud noble y solidaria con las personas. A pesar de sus diferencias naturales, la una y la otra vivían en el centro de la soledad que las v

CON LA DUDA

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El rojo tiene poder en mi mujer. Tiene una cinta roja rodeándole el vientre y la muñeca, con nuditos, dice que es su halo de energía. Caperucita, Pater Nostrum. No sé que le mueve por dentro desde que asiste a esas reuniones. Antes era más, no sé, más sosa. Quizá tenga su magia ese cordón. Es discreto y sexi. Ahí, a la altura del ombligo. No, me equivoco, es solo en la muñeca. No sé porque gasto energía en esto. Pero me viene a la cabeza, al hilo de esto, que para nuestra boda ella quiso casarse con un traje de chaqueta roja. De hecho, estuvo buscándolo, pero no tuvo manera de encontrarlo. Últimamente anda muy enganchada por esa serie de romanas,  La domina. La cosa vendrá por ahí. Ella no es de estar en la luna, es más de planeta rojo. No tiene miedo a llamar la atención. Y el caso es que no se pinta mucho, los labios, de rojo, de vez en cuando, sobre todo cuando vamos a visitar a mi hermano. Para mí que es un ente incorpóreo, ¿qué puede ver en él? Y a él, que nunca le gustó la coci

AUDIORELATO MITIA

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Hola, Llevaba tiempo sin subir  al canal de YouTube  alguna de las historias que escribo en este blog, así que esta vez me he animado. Te invito a escucharla. Es uno de los relatos que participó en la 38ª edición del concurso de relatos del Tintero de oro en torno a la Injusticia social.  El relato lo he convertido en AUDIORELATO. Si aún no has escuchado alguna de mis historias narradas te cuento brevemente sobre su montaje: la historia está contada con fondo musical y también incluyo imágenes, acorde con el argumento, que voy seleccionando de aquí, de allá, algunas son instantáneas viajeras; después con todo, pues mano a la obra con la composición que más me convenza (esto lleva su tiempecito). Siempre procuro que la música y las imágenes cuenten algo más de la historia que si lo hiciera solo con la voz narradora.  Ya me contarás tus impresiones. Gracias por estar. Un abrazote grande

LA MIRILLA. OFERTA DE TRABAJO ATEMPORAL

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  LA MIRILLA OFERTA DE TRABAJO ATEMPORAL Ante la inquietud de un periodo dilatado, insaciable y agotable en lluvias donde cabe un ciclo interminable con un sol doliente, Se busca un carpintero que corte, pula y encole, que se desviva desaforadamente y que ansíe lo insaciable, y por un casual, que tenga la voz pausada, resentida y nasal. Indispensable que haya pasado de la etapa de coquetería de mal gusto, de las redundancias y de los gritos a deshoras. Debe ser capaz de mantener el orgullo ante una puerta cerrada puesto que trabajará en un conjunto de calles y edificios durante las horas desiertas de la noche. Esto no puede provocarle desasosiego, le debe provocar excitación. El ambiente laboral es de quietud; serán transitorios los murmullos y los pálidos escalofríos, por eso, Se valorará una experiencia a intervalos: ·        Viajar con todo el cuerpo, con su total organismo, mientras sea efímera la ráfaga de caballo que deje al pasar. ·        No hablar más de lo necesario, lo

MITIA

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  Mi tía era una isla dentro de mi casa y estaba situada en el piso bajo junto al sótano. Se rodeaba del mar de lágrimas de mi madre y por las noches, del sudor agrio de mi padre que la carcomía por su costado derecho. A mi tía le colgaba el brazo de ese lado y cuando andaba le iba de un lado para otro como un péndulo. Un día la vi flotar y supe que ella dejaría de estar anclada al suelo de aquella casa. Yo tenía cinco años cuando llegó, luego ocho cuando su enfermedad se acordó de ella, daba grima, y tenía ya diez cuando ella se marchó. A mis quince fue cuando supe de nuevo de ella, pero antes, en mi primer periodo, ella ya estaba a la deriva, flotando por el mundo. Esa tía mía ¡Ah! Mi tía. Dijo que se iba porque no hacía nada, que se marchaba a donde encontrara el tiempo para dormir y soñar porque no se ponía de acuerdo con su cuerpo. Una tarada mental. Ella era capaz de escuchar el goteo de la cisterna durante horas mientras que a mí me martilleaba la sangre en las sienes; y en

COMO AUSTIN Y SHELLY

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  Se podría decir que como escritora nació estrellada o  que nunca tuvo buena ventura. Da miedo pensar que hay cosas que se escapan de control. Lo que parecía un simple tintero se tambaleaba en la esquina de una lápida de mármol a apenas un codazo de caerse y abrir un enorme agujero en alguna de aquellas nubes que la rodeaban. Limia estaba sentada en su silla de felpa verde y flotaba con sus pies descalzos sobre aquellos nimbos. Era una vieja escritora nariguda que andaba envuelta en una bata con las mangas raídas y de donde sobresalían unos dedos carcomidos en tinta. Mantenía la boca abierta atrapando entre sus descascarillados dientes la pluma con la que horas antes había estado escribiendo. Llevaba décadas con una entrega feroz por llenar de letras aquel caos blanco que le rodeaba incluso rompió la pluma de aquel tintero que le acompañaba y temiendo lo peor comenzó a escribir con sus uñas de porcelana. Limia sumergía una uña tras otra en aquel enorme tintero no siendo consciente